Reducción de la jornada laboral

El impacto de la reducción de la jornada laboral en la productividad y el bienestar

En España, la reducción de la jornada laboral ha cobrado relevancia, especialmente tras la reciente propuesta del Consejo de Ministros de reducir la semana laboral a 37,5 horas sin disminuir los salarios. Esta medida, que cuenta con el respaldo sindical pero no de la CEOE ni de algunos aliados del Partido Socialista en el Gobierno, aún debe ser aprobada en el Congreso. El objetivo de esta iniciativa es mejorar la conciliación entre la vida laboral y personal, aumentando el bienestar de los trabajadores. Pero persisten las dudas sobre su impacto en la productividad.  Beneficios de la reducción de la jornada laboral para el Bienestar La reducción de la jornada laboral no solo impacta en la productividad y la economía. Sino que también tiene profundas implicaciones en el bienestar de los empleados. Trabajar menos horas puede generar un impacto positivo en la salud física y mental de los trabajadores. Ya que permite un mayor descanso y recuperación, reduciendo el riesgo de enfermedades relacionadas con el estrés y el agotamiento. Además, la reducción de la jornada laboral aumenta la motivación y el bienestar general de los empleados. Al tener más tiempo libre, los trabajadores pueden dedicarlo a actividades que les apasionan. Lo que se traduce en una mayor satisfacción personal y un aumento de la energía y el entusiasmo en el trabajo. Un entorno de trabajo que promueve el bienestar puede resultar en una mayor dedicación y esfuerzo por parte de los trabajadores que se sentirán más comprometidos con su empleo y más satisfechos con sus vidas. Proyectos Pilotos Los proyectos piloto realizados en otros países han demostrado que la reducción de la jornada laboral tiene beneficios tangibles para los empleados, entre los que destacan: Aumento de la motivación y bienestar: Los trabajadores se sienten más valorados y respetados por las empresas que implementan jornadas laborales reducidas. Aumentando su motivación y compromiso. Descenso del estrés: Al tener más tiempo para descansar y recuperarse, los niveles de estrés disminuyen significativamente. Mejorando la salud mental y emocional de los trabajadores. Mejora del equilibrio trabajo-vida personal: La reducción de la jornada laboral permite a los empleados dedicar más tiempo a su familia, amigos y actividades personales. Mejorando su calidad de vida y su bienestar general. Tiempo para el desarrollo profesional: Al tener más tiempo libre, los trabajadores pueden invertirlo en formación y desarrollo de nuevas habilidades. Lo que aumenta sus oportunidades de crecimiento profesional y su empleabilidad. Mayor productividad: Aunque pueda parecer contradictorio, la reducción de la jornada laboral puede aumentar la productividad. Ya que los trabajadores descansados y motivados son más eficientes y cometen menos errores. Reducción del absentismo: Al estar más satisfechos con su trabajo y tener una mejor calidad de vida, los trabajadores tienden a faltar menos al trabajo. Reduciendo los costes para las empresas. Impacto en la Productividad en la reducción de la jornada laboral Aunque existen trabajos de investigación (¿La reducción del tiempo de trabajo mejora el bienestar de los trabajadores? Evidencias de ensayos globales de semanas laborales de cuatro días) que aseguran que la reducción de la jornada laboral es una medida para mejorar el bienestar de los empleados, otros estudios en España sugieren posibles efectos negativos en la productividad y la economía.   Impacto en la Productividad y Costes Laborales Un informe de BBVA Research señala que una reducción de la jornada laboral sin medidas compensatorias podría incrementar los costes laborales en un 1,5% del PIB, lo que podría reducir el crecimiento económico y aumentar la tasa de desempleo.  Asimismo, la parte empresarial, como la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (CECAM), por ejemplo, ha expresado su preocupación por el aumento de los costes laborales, indicando que estos incrementos están afectando negativamente a las medianas empresas y autónomos, y podrían perjudicar la competitividad empresarial.    Efectos en las Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES) Según un informe de CEPYME, la productividad de las PYMES españolas disminuyó un 3,3% en el primer trimestre de 2024 en comparación con el año anterior. El mismo informe advierte que una reducción no negociada del tiempo de trabajo, manteniendo las remuneraciones actuales, podría implicar un coste directo mínimo de 11.800 millones de euros.  Estos estudios sugieren que, sin una planificación y adaptación adecuadas, la reducción de la jornada laboral en España podría tener efectos adversos en la productividad y la economía, especialmente para las PYMES y los autónomos. Implementaciones y Resultados La implementación de esta medida requerirá una adaptación por parte de las empresas. Será esencial establecer sistemas de registro horario confiables para garantizar el cumplimiento de la nueva normativa. Además, las empresas deberán re-evaluar sus procesos internos para mantener la productividad y eficiencia operativa. Así que, ¿cómo pueden afrontarlo?: Análisis previo: Las empresas deberán estudiar cómo afecta la nueva ley a la organización de turnos y el funcionamiento diario de la empresa. Implementación tecnológica: Será necesario considerar la adopción de herramientas digitales que aseguren el cumplimiento de la normativa. Capacitación: Se deberá formar a los equipos para que comprendan y se adapten a los cambios legales y operativos. Consideraciones Finales La reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales en España supone una solución viable para impulsar tanto la eficiencia como la calidad de vida de los empleados. Sin embargo, su éxito estará condicionado por una correcta implementación, de la cooperación entre empleadores y empleados para ajustarse a esta nueva dinámica laboral y por la capacidad de las organizaciones para adaptarse a modelos de trabajo que fomenten el equilibrio entre la vida profesional y personal.

empieza bien el año nuevo

10 pasos para empezar bien el Año Nuevo

Día 3. Ya has pasado la resaca de Nochevieja y has sobrevivido a tu reincorporación al puesto de trabajo. No tienes más excusas, es el momento de colocar el calendario del 2018 en tu mesa de trabajo y empezar bien el Año Nuevo planificándolo. Si quieres ser diferente a los demás, deja de pedir cosas al nuevo año y se tú quien le diga a estos doce meses que vienen por delante, lo que le vas a ofrecer. Para eso, siéntate y sigue estos diez pasos que te recomendamos desde Access Telento. Rescata lo que has hecho bien en el 2017 Empieza de forma positiva. Seguro que ya tienes a esa persona que no para de decirte que puedes hacer mejor algo, o que no has hecho esto otro. Pues bien, deja esa tarea a esa persona y siéntate en una mesa a escribir todo lo que has hecho bien en el pasado año. Si lo haces con música de fondo, puede que te sorprendas la cantidad de escalones que has subido. Con esa lista, verás cuales son tus cualidades. Guárdatelas que luego las necesitarás. Tareas pendientes Venga, ya que estás escribiendo una lista de cosas pasadas, antes de dar un paso al frente, escribe también tres cosas que te gustaría haber hecho y no has podido, por el motivo que sea. Luego habla con tus compañeros, incluso, tu jefe, para saber qué objetivos hay a corto plazo y tus expectativas en la empresa para el nuevo año. Carpetazo definitivo al año pasado Ya tienes una lista con tus cualidades, tus tareas pendientes y tus objetivos… Si a esto le añades el intentar solucionar algún mal entendido con hayas podido tener, ya tienes todos los ingredientes para olvidarte definitivamente del 2017 y empezar bien el Año Nuevo. Señala tus nuevos objetivos Ahora sí, olvídate del pasado y es hora de marcar nuevas metas del futuro. Para ello, revisa tu lista de cualidades y sigue explotándolas buscando aquellos objetivos que te motiven. Subraya las cosas importantes, prioriza tareas y márcate hasta donde quieres llegar en este 2018 Desarrolla tu Plan Anual para lograrlos Teniendo claro a donde quieres llegar, es cuestión de visualizar en el calendario la forma de alcanzar los objetivos. Aquí es el momento en el que dejas claras tus prioridades. Marca cuatro o cinco que consideres fundamentales y ves señalando pequeñas etapas para ir acercándote a cada una de ellas. Míralo como un juego de escape en el que, para superarlo, debes seguir las pistas y superar los retos. Quien mucho abarca… poco aprieta Recuerda que tener demasiadas tareas puede agobiarte y perjudicar tu labor diaria, descendiendo tu ‘productividad’ laboral. No es cuestión de pasar horas delante de un ordenador, sino de las necesarias cada día. Para ello, es primordial que sepas decir que no. Y para no equivocarte al rechazar tareas, que mejor que hacerte el plan anual y mirarlo cuando te bloquees. Sigue formándote Que sí, que sí, tienes un título, diploma o Máster… Lo que quieras, pero en pleno S.XXI, si no estás ‘actualizado’ te pasarán por ambos lados las nuevas generaciones. Si en la lista del principio tienes apuntado ir a ‘clases de…’, con el objetivo de reforzar cualidades o adquirir nuevas, no lo dejes pasar y hazlo este año. Equilibrio entre lo laboral y personal Seguro que muchas de las cosas ‘por hacer’ de esa lista que has hecho antes, eran cosas personales. Intenta este año que no salga de tu boca la frase: “Tengo que saber sacar más tiempo para…”. Está claro que tener un trabajo requiere una responsabilidad y deberes, pero no te olvides que es muy importante parar, respirar, airear la cabeza y seguir. Lo agradecerá tu familia, amigos y tú mismo o misma al sentarte, de nuevo, en la silla, con la misma motivación que ahora. Comparte tu plan con tus compañeros Deja de vivir como si no necesitaras a nadie alrededor. Tienes compañeros de trabajo y alcanzar una buena comunicación con ellos puede ayudarte a lograr tus objetivos más fácilmente o de forma rápida. Es más, incluso, alguno puede tener los mismos objetivos y caminar acompañado es mucho mejor que solo. Haz deporte No hace falta convertirse en un runner profesional o machacarte cuatro días a la semana en un gimnasio. Además, hacer ejercicio debe ser una forma de evadirte del día a día, no una carga más. Simplemente, con media hora al día de salir a pasear, una vuelta en bicicleta, correr pequeñas distancias, etc… basta para ponerte en forma y conseguir olvidarte de agenda, reuniones y emails. Si decides seguir estos pasos para empezar bien el Año Nuevo, seguro que cuando llegue diciembre del 2018 y repases lo escrito, habrá merecido la pena todo el esfuerzo realizado. Desde Access Gestión Integral de Empleo te deseamos mucha suerte en el Año Nuevo y recordarte que, si nos necesitas, estaremos encantados de poder ayudarte.